De lo que me pasó cuando no escribí

Luego de haber obtenido una chamba bastante respetable en un sitio bastante respetable y con un sueldo bastante respetable, ordené mi cerebro y aislé en un círculo de tiza los temores. Decidí entonces dejar cuatro cursos de la universidad y quedarme con dos, para así dedicarme a la chamba.
¿Como me va?: Muy bien!
¿Tengo miedo? : Uf! me orino de miedo, pero creo haber tomado la decisión correcta (o no?!!1 jajaja!)
Ahora me doy cuenta de que no es tan grave atrasarse unos ciclos en la universidad, total tengo 19 años y estoy en 7mo ciclo. NO es taaaaaaaaaan grave!!!!
En toda la basura que era mi cerebro, encontré o mas bien reencontré a un ángel que siempre ha querido nada más que ayudarme: mi ex, que ahora ya no sera llamado ex sino que se le conocerá como Negrito (he dicho!) No me habia dado cuenta de lo bien que me hace estar con él. ¿Què tienes? ¿Còmo haces? ¿Cómo has hecho para soportar mis locuras y reirte de mis mismos chistes todos los dias? ¿Cómo soportas mi sedentaria vida? No lo sé, pero eres francamente genial!
Negrito sin embargo no fue el único ángel en estos días. Mis papas SE PASARON, despertarse a las cinco y media am para adecuarse a mi ritmo y ayudarme con mis trámites y demás...
Excepcionales, definitivamente sí.
En conclusión ¿qué me pasó cuando no escribí? Me dediqué a escribir mis propias historias en algùn lugar del cerebro. Las escribí con tinta indeleble para que no se borren nunca y para que me queden bien grabadas esas maravillosas personas que se la jugaron y hasta ahora se la juegan por mí.
Sobrinos, descubrí lo mucho que alguna gente me estima y tener eso de ellos me hace muy orgullosa.
Asì hablo la tía. Persignense y sigan palante!